Así como ocurrió en el Mundial, la segunda fecha de la Copa América trajo más goles y emociones que la primera, aunque el nivel futbolístico sigue siendo pobretón y amarrete. Sin dudas el hecho de que Argentina, Brasil y Uruguay, los tres grandes del continente y los tres candidatos al título, hayan empatado ambos partidos y se vean obligados a ganar el último si es que quieren clasificarse a cuartos.
GRUPO A
Nuevo empate albiceleste y la cosa se le complica a la selección argentina ya que con 2 puntos está obligada a derrotar a Costa Rica para clasificarse a la siguiente ronda. Uno supone que enfrentandose un equipo plagado de estrellas a nivel mundial, donde el salario de uno solo de ellos supera al de todo el equipo rival, Argentina debería ganarle a Costa Rica fácil. El problema es que esta Argentina volvió a jugar pésimo ante Colombia y se salvó de una derrota solo por el hecho de que los colombianos estuvieron desacertados de cara al gol. El planteo del Bolillo Gómez fue perfecto, con un mediocampo compacto, con hombres de marca como Aguilar y Sánchez y tres jugadores con creatividad y sacrificio como Guarín, Ramos y Moreno. Estos dos últimos tuvieron las más claras del partido, primero el jugador del Hertha Berlin fallando en el área chica y luego el del Once Caldas tras una gran finta de Ramos, penal de Burdisso no cobrado porque la ley de la ventaja llevaba al gol cantado, cosa que no ocurrió por esas cosas de la vida.
Romero fue figura, Argentina no se encontró nunca y terminó desesperado y abucheado. Messi desconocido y sólo, los tres 5 de la mitad de la cancha no se asemejan en absoluto a lo que propone el Barcelona -reflejo por el cual se regía Batista- y tanto Lavezzi como Tévez pecaron de individualistas. Messi no tiene compañeros que se desmarquen, todos esperan que saque a 11 jugadores de encima y meta el gol del siglo y así no va. Messi juega como juega en Barcelona porque tiene jugadores que le acompañan, le entienden y se le mueven. Ahora Batista va a cambiar y poner un equipo más acorde a lo que debería haber puesto al principio, un 4-2-3-1 con Higuaín de punta, Di María, Messi y Agüero y con Gago y Mascherano en el medio. Debería dar resultado porque parece un equipo mucho más capaz de asociarse que lo que venía alineando, pero como en esta Copa cualquier cosa puede pasar, no se asegura nada con eso. Argentina tiene toda la presión y La Volpe es un DT que sabe como maniatar a la selección albiceleste.
Hablando del equipo Tico, logró una gran victoria ante Bolivia por 2-0 con una gran actuación de la primera joya que sale de esta Copa América, Joel Campbell de 19 años. Por algunos momentos Bolivia fue más, pero le falta ese extra necesario para romper con una línea defensiva. Tuvo algunas oportunidades y las falló, así empezó la desesperación y se vio reflejada esa falta de ideas y ese desconocimiento de la tarea de ofender. Terminó chocandose con una pared y con sus propias limitaciones, dejó espacios en el fondo y Costa Rica los aprovechó. Después del primer gol, que vino de contragolpe, todo fue más fácil para los costarricenses que tuvieron dos pelotas en los palos, un penal fallado y un nuevo gol, aprovechando las dos expulsiones bolivianas y la velocidad de Campbell.
Colombia se clasificó primera de grupo y los demás lo tienen muy complicado. Debería pasar Argentina, pero a esta altura nada se sabe.
GRUPO B
El otro gigante del continente volvió a decepcionar y empató en un partido entretenido ante Paraguay. El rival era de fuste y lo demostró, jugando un gran partido y solo pecando en la última jugada. Menezes sacó a Robinho y puso a Jadson para tratar de encontrar más juego. Eso no se vio reflejado en el primer tiempo porque Paraguay jugó muy bien en su estilo, agrupado atrás, combativo en el medio y cortando la circulación brasileña. Aún así el jugador del Shakthar consiguió empalmar el primer gol con la especialidad de la casa, el remate de larga distancia. Aún así no era justo el resultado y eso se confirmó en un vibrante segundo tiempo, donde Brasil pecó de ingenuo y cometió los mismos errores más de una vez. Dani Alves jugó uno de los peores partidos que le he visto, dejando muchos espacios a sus espaldas y Lucio no le cubrió tan bien como lo hace Piqué en Barcelona. Así llegaron los dos goles, primero de Santa Cruz y el segundo de Haedo Valdez de carambola, luego de que Alves la perdiera dentro del área por exceso de confianza. Fred le salvó los papeles a Menezes empatando a falta de dos minutos tras una gran asistencia de Ganso. Éste es un gran jugador pero aparece demasiado poco, tiene que meterse más en los partidos y colaborar con ese tipo de jugadas que él es capaz.
De Parguay destacar a Estigarribia por izquierda aprovechando los huecos en la defensa, a ese mediocampo luchador y a la pegada de esa delantera temible que tiene con un todavía vigente Santa Cruz y que con Haedo siempre tiene un arma para revolucionar partidos. Lucas Barrios no se siente cómodo compartiendo la delantera con el histórico goleador y eso se ve reflejado en su juego, pasando desapercibido por muchos momentos y tocando muy pocas pelotas, y en su capacidad goleadora que está siendo nula en esta Copa donde no ha tenido ni una chance de gol todavía.
En el otro partido ocurrió la "gran" sorpresa donde Venezuela le ganó 1-0 a Ecuador con gol del "Maestrico" González. No se puede hablar de sorpresa porque Venezuela le viene ganando seguido ultimamente al equipo ecuatoriano y lo volvió a ratificar jugando mejor prácicamente todo el partido. Ecuador recién reaccionó cuando estaba perdiendo y faltaba poco para el final, pero antes de eso no había tenido ni una chance clara, ni un acercamiento riesgoso para Reny Vega. Y si bien Venezuela no fue una máquina de jugar, manejó el partido con el control de la pelota, con una defensa sólida y jugando inteligente. Llegó varias veces, algunas claras, otras no tanto y finalmente consiguió el tanto. Ahí despertó Ecuador pero es un equipo sin ideas, sin variantes y que a pesar de tener muy buenos jugadores hay una falta de confianza impresionante. Hicieron grandes jugadas a partir del gol de Venezuela que terminaron en nada, sobre todo la de Caicedo, que superó a tres hombres y se aprontaba a meter el gol de la Copa y le regaló la pelota a Vega con una masita. Ecuador está prácticamente afuera, tiene que jugar con Brasil y no se le ve capaz de hacer algo sin Valencia. Los demás están en la última parte de sus carreras y jugando sin personalidad, sin compañerismo y sin confianza.
Venezuela con la victoria se asegura el puesto en cuartos de final nuevamente y pase lo que pase con Paraguay, ya ha conseguido dos cosas. La primera clasificarse y la segunda convencerse que ahora sí está de igual a igual con cualquier otra selección de América. Está sólido, aparecen nuevos jugadores y tiene las armas para complicar a cualquiera en cualquier cancha. Creo que esto es lo más positivo y seguro que utilizarán muchas cosas de esta Copa en las Eliminatorias.
GRUPO C
Que hubiera sido de este grupo si México traía su equipo titular... Ya de por sí está muy parejo y sin dudas hubiera sido totalmente igualado. Pero por ahora son Perú y Chile los que tomaron ventaja derrotando al joven equipo mexicano que no lo ha hecho mal pero que le falta peso, sobre todo en ataque, donde Giovani Dos Santos está demasiado solo para marcar diferencias reales. En el encuentro con Perú, teoricamente el más débil de los tres que tenía que enfrentar, llegó muy poco al arco rival, fue siempre bien contenido por al zaga peruana y realmente Perú no pasó ningún tipo de zozobra. Y además México cometió un par de erroes que a este nivel no se perdonan y el equipo incaico demostró tener pegada arriba y aprovechar esos errores. Además controló la pelota, el mediocampo y si bien no fue un festival futbolístico ni una catarata de situaciones generadas, ganó bien y pudo haber marcado más goles si hubiera aprovechado las contras y la cantidad de pelotas paradas que tuvo a disposición.
Ahora Perú va con Chile en un encuentro que no le será fácil, contra uno de los equipos más rápidos y el más ofensivo del campeonato y en un clásico donde será visitante. De todas formas ha mostrado cualidades y orden, por lo que una victoria o un empate es posible. Ambos resultados son positivos, ya está clasificada a cuartos y sin nada que perder, ya que no se esperaba demasiado de este equipo.
En el otro partido se enfrentaron dos estilos opuestos. Chile ofensivo y Uruguay defensivo y contragolpeador. Y se dio un partido de ida y vuelta, por momentos el mejor del torneo, con llegadas, atajadas, tiros en los palos y un par de jugadas interesantes que terminaron en los goles. Chile salió con la propuesta de los últimos tiempos, marcar por agotamiento, con muchas llegadas por los laterales, remates de lejos y con algún que otro intento de pases profundos. La ausencia de Mati Fernández y con Valdivia en el banco impidió más de esos pases que terminan siendo claves para lo que pretende Borghi y eso se vio reflejado con al entrada del Mago, gestor del gol del empate. Fue más Chile, lo buscó todo el partido y se anmió más al final, donde estuvo cerca y se encontró con un buen Muslera que evitó un par de goles. Tampoco fue un vendabal de fútbol, pero quiso más y mereció más.
El fútbol no es de merecimientos y por eso terminó en empate. También porque Uruguay aprovechó una de las oportunidades que generó gracias a un gran Suárez que tuvo un par que no entraron pero que hizo toda la jugada del primer gol. Cavani muy escorado a la derecha y con una lesión que no se había detectado, pasó desapercibido, Forlán muy lejos del arco, negado de cualquier chance de remate lejano y todos los demás jugadores muy lejos. Creo que Tabarez consideró bueno el empate y por eso hizo los cambios que hizo. El Tata protegía las bandas, por donde llegaba Chile, Lodeiro para tener la pelota, cosa que no sucedió, y Eguren para ganar por arriba, aunque no tocó una pelota en los minutos que estuvo arriba. Por momentos Uruguay depende demasiado de las individualidades y así es muy difícil. No siempre les salen todas a los delanteros. Aún así con estos fenómenos en cualquier momento puede llegar un gol, por lo que es una apuesta que puede ser positivia ante defensas pobres. La dupla del centro está lejos al rendimiento del año pasado, muy imprecisos tanto el Ruso Pérez como Arévalo Ríos, y esa falta de juego interno se nota demasiado.
Tendrá que mejorar de cara al partido con México, tiene que proponer y demostrar por qué fue cuarto en el mundial, por qué tiene 14 Copas Américas y por qué la gente está tan ilusionada con este equipo. Jugando así se va a sufrir mucho y se va a depender demasiado de los de arriba. Veremos que propuesta hace el Maestro con las bajas de Cáceres y Cavani y si se la juega a ofender más.
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