HOLANDA 0-1 ESPAÑA
Llegamos al final de este mes a puro fútbol y encontramos un nuevo campeón. Una nueva selección iba a tener su estrella y esta fue para España. Una España merecedora del título por donde se lo mire, con rendimientos individuales fenomenales y sobre todo, un rendimiento colectivo superior a cualquier otra selección por lejos. Una España más catalana que nunca, con 6 hombres claves de las líneas del Barça, pero que se formó como un equipo donde no importa el origen ni el club al que representan. En todas las líneas mostró puntos fuertes y si bien no brilló como en la Euro 2008, o como en el proceso eliminatorio, consiguió ser sólido y efectivo jugando bonito, algo difícil de encontrar en el fútbol. Presionando arriba, buscando la mayor posesión de balón posible, España somete a sus rivales a su ritmo, a su juego, y se hace imposible jugarle de igual a igual porque siempre terminas perdiendo. Es por esto que han sido los equipos con posturas netamente defensivas los que han logrado complicarle más: Suiza, Paraguay y Holanda en la final. Una Holanda que sorprendió, si bien ya había sido el equipo más pegador del mundial, en la final se fue al extremo de la dureza, y si no era por lo blando de Howard Webb, tendría que haber sufrido por lo menos dos expulsiones más de la que sufrió: Van Bommel por reiteración de faltas, De Jong por la patada ninja a Xabi Alonso, Robben por seguir el juego deliberadamente teniendo ya amarilla, además de la de Heitinga que tampoco pegó tanto. Claro resumen igual de lo brusco que fue el juego naranja que sólo 3 jugadores de los titulares terminaron sin tarjeta.
Pero ese juego terminó dandole buenos resultados a Holanda, ya que logró maniatar y hacer entrar a España en el terreno donde no debe, en ese reparto de golpes. Así se terminó dando un partido chato, feo, sucio y deslucido, pero parejo. Tan parejo fue que Holanda tuvo las chances más claras en los 90, sobre todo ese mano a mano de Robben con Casillas que "San Iker" logró salvar. Y eso también tiene su mérito, el lograr hacer jugar mal a España es mérito de Holanda, así como lo había sido de Paraguay en cuartos, y esa no es una tarea fácil. Igual no le dió, pegó demasiado y terminó pagando las consecuencias al quedar con un hombre menos y sin más cambios. Esa ventaja sumada al desgaste de 115 minutos corriendo atrás de la pelota y con casi todos los jugadores en riesgo de otra expulsión, terminaron influyendo para que llegara el gol español.
Un gol, que más que un gol, es un premio para un jugador fantástico y merecedor de todos los honores, como el gran Andrés Iniesta. Queda chiquito aquel golazo en el último minuto en Stamford Bridge con la camiseta blaugrana al lado de este, si bien el festejo fue similar, la importancia de uno parecía enorme, pero al lado de este es un poroto. Meter un gol a falta de tan poco para el final del mundial debe ser único y este pequeño gigante, blanquito, pelado y poco mediático jugador, consiguió el sueño de todos los que alguna vez tocamos una pelota de fútbol. Y se lo merece. Por todo lo que hizo en el Barça en los últimos años, injustamente opacado por la figura de Messi, donde mueve los hilos del mejor equipo del mundo con su visión de juego privilegiada, la pelota atada a sus pies y la simpleza de hacer que todo parezca fácil al lado de su compinche Xavi, y que se trasladó a la selección española para transmitir ese estilo que tantos éxitos había conseguido con el Barça y que ahora se culmina con lo máximo a lo que puede asprirar un jugador de fútbol: ser Campeón del Mundo.
Es así que finalmente no nos queda más que decir que España es un justo campeón, que confirmó su candidatura anterior al comienzo (como decíamos en la entrada previa al mundial)y que muchos se pusieron a dudar tras la caída con Suiza, sumamente injusta y donde pagó la falta de gol en la última jugada y donde una desconcentración le hizo pagar caro. Aún así se recuperó y batió 2-0 a la débil Honduras, resultado que se quedó corto y que podía llegar a complicarle si no obtenía un buen resultado ante Chile en su tercer partido de grupo. Ahí se enfrentó ante el primero que salió a agredirlo y la pasó mal, hasta que Villa llegó a su tercer gol aprovechando el error del arquero Bravo y encaminó a España rumbo a octavos de final, con esa victoria por 2-1. El primer puesto conseguido le permitió evitar a Brasil, aunque el enfrentamiento con Portugal era potencialmente peligroso, pero al que minimizó por completo y dio su primer gran demostración del fútbol que venía pregonando antes del mundial. La victoria por 1-0 quedó corta (gracias al arquero Eduardo) pero colocaba a España en cuartos de final y dando una buena imagen. Ahí sufrió quizás el partido más difícil del mundial y donde la pasó peor ante Paraguay, que consiguió hacerle sentir incomodo con la pelota y donde Casillas se revindicó de las críticas que venía teniendo en lo previo al salvar un penal que terminó siendo clave. El 1-0 terminó con la racha negativa en esta instancia de cuartos de final, donde nunca habían podido ganar en un mundial y les daba paso a la primera semifinal mundialista en la historia de la selección española para verse las caras con Alemania. Una Alemania que venía asustando tras sendas goleadas ante Inglaterra y Argentina pero que se vio totalmente superada por el mejor partido de España en el mundial, jugando a la perfección y a pesar de haber ganado nuevamente por 1-0, fue muy superior al equipo germano. Con el pasaje a la primera final y ya habiendo firmado su mejor participación, el objetivo era el título, y era la máxima favorita para lograrlo ante Holanda. Y como todos sabemos el partido fue durísimo y aspero, pero la intención de ir a buscar la victoria fue siempre de España que sufrió para conseguir la victoria, pero que finalmente culminó con la gloria máxima.
Un equipo que está claramente por encima de cualquier individualidad, y que tuvo puntos muy altos, empezando por "San Iker", héroe ante Paraguay y con intervenciones clave en semifinales y también en la final, tapando dos mano a mano. Con más de 550 minutos sin recibir goles, siendo el del descuento de Chile el último, se coronó como el Guantes de Oro del mundial y en forma merecida. Para hacerlo también contó con el apoyo de una defensa de gran rendimiento. Sergio Ramos tuvo un gran mundial, abriendo muy bien la cancha por su lateral y sirviendo como alternativa a cada ataque, y si bien no destacó tanto en defensa, tuvo el rendimiento físico como para hacer el ida y vuelta y colaborar en lo que es su función primordial. Es por eso que su gran rendimiento tiene nombre y apellido: Gerard Piqué, porque el catalán fue el auxilio constante cada vez que Ramos se proyectaba, cubriendole las espaldas y firmando un campeonato perfecto. Piqué fue, en mi opinión, el mejor central del mundial, haciendo todo bien, cuando lo encararon estuvo firme, cuando tuvo que responder por arriba fue una garantía y además cubrió espaldas y espacios por toda la línea defensiva junto a su colega del Barça Carles Puyol, otro de gran rendimiento. Un Puyol que quizás no estuvo tan firme como su compañero, pero terminó siendo clave gracias a su liderazgo, entrega, personalidad y a su golazo contra Alemania. Y también España contó con un jugador que quizás no luce tanto ni se habla tanto de él, pero que tuvo una muy buena participación, como es Joan Capdevila. El del Villareal cumplió a la perfección su trabajo en defensa, pero también creó espacios al proyectarse con criterio por izquierda, ayudando a abrir la cancha por ese sector. Tal vez no fue tan incisivo como Ramos ni lució tanto como Piqué a la hora de los cierres, pero su sector estuvo siempre bien cuidado y los que dudaban de sus condiciones tuvieron que callarse la boca.
Pero el punto más fuerte del campeón es el mediocampo. Fue criticado el "Bigotón" Del Bosque por poner el "doble pivote" de Xabi Alonso y Sergio Busquets, ya que decían que era demasiado conservador, pero ambos firmaron una gran Copa del Mundo. Busquets confirmó su gran temporada en el Barça y con su calma y tranquilidad brindó balance al mediocampo y la distribución necesaria en ese sector, además de servir de apoyo defensivo en las subidas de Ramos y también le quitó responsabilidades en ese sentido a Xavi y los demás. A su lado Xabi Alonso cumplió muy bien su trabajo, siendo importante en el manejo de la pelota y llegando muchas veces cerca del área tanto para rematar como para asistir, además de desahogar al equipo con sus precisos cambios de frente. La presencia de estos dos liberó más a los motores futbolísticos del juego del Barcelona y de España: Xavi e Iniesta, los dos genios del fútbol mundial. Quizás en el mundial no estuvieron al nivel que han venido mostrando en los últimos dos años, pero igual marcan diferencias y son claves en manejar el juego que propone España. Ver a Xavi en la cámara personalizada es un placer, como está siempre con la cabeza levantada y mostrándose para pedir el balón. Y lo de Iniesta es plétorico, como ya dijimos más arriba. Si bien no lucieron tanto como suelen hacerlo, son claves para este equipo y esa identidad del buen juego y el toque, y tienen el plus de haber ido de menos a más en el torneo, siempre importante para un equipo que busca salir campeón.
Y si además de toda esta base se tiene a un goleador implacable como David Villa, importantísimo en el andar español hasta semifinales. Quedó claro que no es un 9 de área, y que se desempeña mejor con otro delantero, como se pudo ver tanto contra Suiza como contra Alemania y Holanda, pero con Torres o con Llorente como compañeros de delantera fue cuando funcionó mejor, más tirado a la izquierda, y ahí consiguió sus 5 goles importantísimos, teniendo en cuenta que España terminó sufriendo más de la cuenta la falta de gol. El otro jugador varió a lo largo del mundial, siendo Silva el que debutó sin mucha suerte ante Suiza, y luego un disminuído y falto de fútbol Torres el que acompañó a Suiza en los siguientes partidos. Llorente y Cesc Fàbregas fueron importantes cuando entraron y le dieron distintas cosas, uno más ritmo y profunidad y el otro liberó a Villa acaparando la atención de los centrales de Portugal. En semifinales el que entró como titular fue Pedro, el histórico Pedro anotador en todas las competencias, y que estuvo cerca de hacerlo también en el mundial, y que terminó siendo sumamente incisivo y determinante nada más ni nada menos que en semifinales contra Alemania -donde fue incontrolable y se apareció por todos lados- como en la final contra Holanda -donde quizás no fue tan importante como en el partido anterior pero se mostró movedizo también y con buenas intenciones.
Todos estos jugadores fueron además apoyados por un banco que se sabía supente y no se quejaba, con muy buenos jugadores como Navas (de buen partido en la final), Javi Martínez, Mata, Arbeloa, Marchena, Albiol, Victor Valdés y sobre todo Pepe Reina, que han sido claves a la hora de "formar grupo" y apoyar a los que saltaban al terreno de juego. 23 jugadorazos que han hecho historia, bajo el mando de un hombre que también sabe lo que es formar grupos, tal como lo había hecho en el Real Madrid de los galácticos, el último equipo blanco en triunfar, y que hoy está demostrando una habilidad nata para tener a todos contentos y tirando para el mismo lado. Quizás la base del equipo es del Barcelona, pero algo de reconocimiento se lleva también el Madrid gracias a este gran entrenador.
Llegamos al final de este mes a puro fútbol y encontramos un nuevo campeón. Una nueva selección iba a tener su estrella y esta fue para España. Una España merecedora del título por donde se lo mire, con rendimientos individuales fenomenales y sobre todo, un rendimiento colectivo superior a cualquier otra selección por lejos. Una España más catalana que nunca, con 6 hombres claves de las líneas del Barça, pero que se formó como un equipo donde no importa el origen ni el club al que representan. En todas las líneas mostró puntos fuertes y si bien no brilló como en la Euro 2008, o como en el proceso eliminatorio, consiguió ser sólido y efectivo jugando bonito, algo difícil de encontrar en el fútbol. Presionando arriba, buscando la mayor posesión de balón posible, España somete a sus rivales a su ritmo, a su juego, y se hace imposible jugarle de igual a igual porque siempre terminas perdiendo. Es por esto que han sido los equipos con posturas netamente defensivas los que han logrado complicarle más: Suiza, Paraguay y Holanda en la final. Una Holanda que sorprendió, si bien ya había sido el equipo más pegador del mundial, en la final se fue al extremo de la dureza, y si no era por lo blando de Howard Webb, tendría que haber sufrido por lo menos dos expulsiones más de la que sufrió: Van Bommel por reiteración de faltas, De Jong por la patada ninja a Xabi Alonso, Robben por seguir el juego deliberadamente teniendo ya amarilla, además de la de Heitinga que tampoco pegó tanto. Claro resumen igual de lo brusco que fue el juego naranja que sólo 3 jugadores de los titulares terminaron sin tarjeta.
Pero ese juego terminó dandole buenos resultados a Holanda, ya que logró maniatar y hacer entrar a España en el terreno donde no debe, en ese reparto de golpes. Así se terminó dando un partido chato, feo, sucio y deslucido, pero parejo. Tan parejo fue que Holanda tuvo las chances más claras en los 90, sobre todo ese mano a mano de Robben con Casillas que "San Iker" logró salvar. Y eso también tiene su mérito, el lograr hacer jugar mal a España es mérito de Holanda, así como lo había sido de Paraguay en cuartos, y esa no es una tarea fácil. Igual no le dió, pegó demasiado y terminó pagando las consecuencias al quedar con un hombre menos y sin más cambios. Esa ventaja sumada al desgaste de 115 minutos corriendo atrás de la pelota y con casi todos los jugadores en riesgo de otra expulsión, terminaron influyendo para que llegara el gol español.
Un gol, que más que un gol, es un premio para un jugador fantástico y merecedor de todos los honores, como el gran Andrés Iniesta. Queda chiquito aquel golazo en el último minuto en Stamford Bridge con la camiseta blaugrana al lado de este, si bien el festejo fue similar, la importancia de uno parecía enorme, pero al lado de este es un poroto. Meter un gol a falta de tan poco para el final del mundial debe ser único y este pequeño gigante, blanquito, pelado y poco mediático jugador, consiguió el sueño de todos los que alguna vez tocamos una pelota de fútbol. Y se lo merece. Por todo lo que hizo en el Barça en los últimos años, injustamente opacado por la figura de Messi, donde mueve los hilos del mejor equipo del mundo con su visión de juego privilegiada, la pelota atada a sus pies y la simpleza de hacer que todo parezca fácil al lado de su compinche Xavi, y que se trasladó a la selección española para transmitir ese estilo que tantos éxitos había conseguido con el Barça y que ahora se culmina con lo máximo a lo que puede asprirar un jugador de fútbol: ser Campeón del Mundo.
Es así que finalmente no nos queda más que decir que España es un justo campeón, que confirmó su candidatura anterior al comienzo (como decíamos en la entrada previa al mundial)y que muchos se pusieron a dudar tras la caída con Suiza, sumamente injusta y donde pagó la falta de gol en la última jugada y donde una desconcentración le hizo pagar caro. Aún así se recuperó y batió 2-0 a la débil Honduras, resultado que se quedó corto y que podía llegar a complicarle si no obtenía un buen resultado ante Chile en su tercer partido de grupo. Ahí se enfrentó ante el primero que salió a agredirlo y la pasó mal, hasta que Villa llegó a su tercer gol aprovechando el error del arquero Bravo y encaminó a España rumbo a octavos de final, con esa victoria por 2-1. El primer puesto conseguido le permitió evitar a Brasil, aunque el enfrentamiento con Portugal era potencialmente peligroso, pero al que minimizó por completo y dio su primer gran demostración del fútbol que venía pregonando antes del mundial. La victoria por 1-0 quedó corta (gracias al arquero Eduardo) pero colocaba a España en cuartos de final y dando una buena imagen. Ahí sufrió quizás el partido más difícil del mundial y donde la pasó peor ante Paraguay, que consiguió hacerle sentir incomodo con la pelota y donde Casillas se revindicó de las críticas que venía teniendo en lo previo al salvar un penal que terminó siendo clave. El 1-0 terminó con la racha negativa en esta instancia de cuartos de final, donde nunca habían podido ganar en un mundial y les daba paso a la primera semifinal mundialista en la historia de la selección española para verse las caras con Alemania. Una Alemania que venía asustando tras sendas goleadas ante Inglaterra y Argentina pero que se vio totalmente superada por el mejor partido de España en el mundial, jugando a la perfección y a pesar de haber ganado nuevamente por 1-0, fue muy superior al equipo germano. Con el pasaje a la primera final y ya habiendo firmado su mejor participación, el objetivo era el título, y era la máxima favorita para lograrlo ante Holanda. Y como todos sabemos el partido fue durísimo y aspero, pero la intención de ir a buscar la victoria fue siempre de España que sufrió para conseguir la victoria, pero que finalmente culminó con la gloria máxima.
Un equipo que está claramente por encima de cualquier individualidad, y que tuvo puntos muy altos, empezando por "San Iker", héroe ante Paraguay y con intervenciones clave en semifinales y también en la final, tapando dos mano a mano. Con más de 550 minutos sin recibir goles, siendo el del descuento de Chile el último, se coronó como el Guantes de Oro del mundial y en forma merecida. Para hacerlo también contó con el apoyo de una defensa de gran rendimiento. Sergio Ramos tuvo un gran mundial, abriendo muy bien la cancha por su lateral y sirviendo como alternativa a cada ataque, y si bien no destacó tanto en defensa, tuvo el rendimiento físico como para hacer el ida y vuelta y colaborar en lo que es su función primordial. Es por eso que su gran rendimiento tiene nombre y apellido: Gerard Piqué, porque el catalán fue el auxilio constante cada vez que Ramos se proyectaba, cubriendole las espaldas y firmando un campeonato perfecto. Piqué fue, en mi opinión, el mejor central del mundial, haciendo todo bien, cuando lo encararon estuvo firme, cuando tuvo que responder por arriba fue una garantía y además cubrió espaldas y espacios por toda la línea defensiva junto a su colega del Barça Carles Puyol, otro de gran rendimiento. Un Puyol que quizás no estuvo tan firme como su compañero, pero terminó siendo clave gracias a su liderazgo, entrega, personalidad y a su golazo contra Alemania. Y también España contó con un jugador que quizás no luce tanto ni se habla tanto de él, pero que tuvo una muy buena participación, como es Joan Capdevila. El del Villareal cumplió a la perfección su trabajo en defensa, pero también creó espacios al proyectarse con criterio por izquierda, ayudando a abrir la cancha por ese sector. Tal vez no fue tan incisivo como Ramos ni lució tanto como Piqué a la hora de los cierres, pero su sector estuvo siempre bien cuidado y los que dudaban de sus condiciones tuvieron que callarse la boca.
Pero el punto más fuerte del campeón es el mediocampo. Fue criticado el "Bigotón" Del Bosque por poner el "doble pivote" de Xabi Alonso y Sergio Busquets, ya que decían que era demasiado conservador, pero ambos firmaron una gran Copa del Mundo. Busquets confirmó su gran temporada en el Barça y con su calma y tranquilidad brindó balance al mediocampo y la distribución necesaria en ese sector, además de servir de apoyo defensivo en las subidas de Ramos y también le quitó responsabilidades en ese sentido a Xavi y los demás. A su lado Xabi Alonso cumplió muy bien su trabajo, siendo importante en el manejo de la pelota y llegando muchas veces cerca del área tanto para rematar como para asistir, además de desahogar al equipo con sus precisos cambios de frente. La presencia de estos dos liberó más a los motores futbolísticos del juego del Barcelona y de España: Xavi e Iniesta, los dos genios del fútbol mundial. Quizás en el mundial no estuvieron al nivel que han venido mostrando en los últimos dos años, pero igual marcan diferencias y son claves en manejar el juego que propone España. Ver a Xavi en la cámara personalizada es un placer, como está siempre con la cabeza levantada y mostrándose para pedir el balón. Y lo de Iniesta es plétorico, como ya dijimos más arriba. Si bien no lucieron tanto como suelen hacerlo, son claves para este equipo y esa identidad del buen juego y el toque, y tienen el plus de haber ido de menos a más en el torneo, siempre importante para un equipo que busca salir campeón.
Y si además de toda esta base se tiene a un goleador implacable como David Villa, importantísimo en el andar español hasta semifinales. Quedó claro que no es un 9 de área, y que se desempeña mejor con otro delantero, como se pudo ver tanto contra Suiza como contra Alemania y Holanda, pero con Torres o con Llorente como compañeros de delantera fue cuando funcionó mejor, más tirado a la izquierda, y ahí consiguió sus 5 goles importantísimos, teniendo en cuenta que España terminó sufriendo más de la cuenta la falta de gol. El otro jugador varió a lo largo del mundial, siendo Silva el que debutó sin mucha suerte ante Suiza, y luego un disminuído y falto de fútbol Torres el que acompañó a Suiza en los siguientes partidos. Llorente y Cesc Fàbregas fueron importantes cuando entraron y le dieron distintas cosas, uno más ritmo y profunidad y el otro liberó a Villa acaparando la atención de los centrales de Portugal. En semifinales el que entró como titular fue Pedro, el histórico Pedro anotador en todas las competencias, y que estuvo cerca de hacerlo también en el mundial, y que terminó siendo sumamente incisivo y determinante nada más ni nada menos que en semifinales contra Alemania -donde fue incontrolable y se apareció por todos lados- como en la final contra Holanda -donde quizás no fue tan importante como en el partido anterior pero se mostró movedizo también y con buenas intenciones.
Todos estos jugadores fueron además apoyados por un banco que se sabía supente y no se quejaba, con muy buenos jugadores como Navas (de buen partido en la final), Javi Martínez, Mata, Arbeloa, Marchena, Albiol, Victor Valdés y sobre todo Pepe Reina, que han sido claves a la hora de "formar grupo" y apoyar a los que saltaban al terreno de juego. 23 jugadorazos que han hecho historia, bajo el mando de un hombre que también sabe lo que es formar grupos, tal como lo había hecho en el Real Madrid de los galácticos, el último equipo blanco en triunfar, y que hoy está demostrando una habilidad nata para tener a todos contentos y tirando para el mismo lado. Quizás la base del equipo es del Barcelona, pero algo de reconocimiento se lleva también el Madrid gracias a este gran entrenador.
La fiesta es toda española y se lo merecen, olvidandose de la crisis, de los nacionalismos y demás problemas que aquejan al español, hoy están todos alegres, todos vibrando gracias al fútbol y a este equipo que le ha dado todo al fútbol español. FELICITACIONES ESPAÑA!!
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