Dos horas después, y tras varios rumores, el diario Bild y luego el twitter y la página oficial del club, dieron por hecha la noticia que sacudió al mundo del fútbol por unas horas: Josep Guardiola, el ya legendario entrenador que llevó al Barcelona a ser el mejor equipo del mundo, será el próximo entrenador del club bávaro a partir de la próxima temporada.
Heynckes, veterano ya de 68 años, tomó la decisión por ellos: decidió su futuro hoy y les anunció que se retiraría al terminar esta temporada, dando camino libre así al fichaje del español. Podría haberlo hecho más tarde y haber comprometido la chance del club de contratar al entrenador más codiciado del mercado, pero puso al Bayern en prioridad y optó por irse en julio.
Así es que se dio la llegada de Guardiola a Alemania, y para muchos sonará a sorpesa que haya elegido una liga en teoría menor como la Bundesliga, desinformados todos ellos, claro está. Hablando con compañeros futboleros les había tirado que tenía una premonición de que Pep podría terminar en el Bayern y dejar de lado a los grandes de Inglaterra por diversos motivos. Además, amigos alemanes también me dieron a conocer el fuerte interés del gigante bávaro por hacerse con los servicios del de Santpedor.
Y las razones que daba para ello eran varias y a la larga terminaron siendo determinantes. En primer lugar, el Bayern es el equipo más grande de Alemania (país más poblado de Europa Occidental y el más poderoso económicamente), con 22 títulos de Bundesliga, 4 Copas de Europa y una tradición que supera a la de los nuevos ricos de las islas británicas por una distancia sideral.
Además, tiene un equipo extremadamente competitivo hoy en día, con jugadores base de la selección alemana, y que marcha como puntero a 9 puntos del segundo en liga y es candidato firme a conseguir la Champions League, además de haber llegado a la final del máximo torneo continental en dos de las últimas tres ediciones (2009-2010 y 2011-2012), por lo que Pep tendría excelente materal para trabajar.
A todo esto se le suma la solidez económica del club y de la Bundesliga en general: por norma, los equipos no pueden tener más gastos que ingresos para participar, no como en otras ligas donde las deudas son multimillonarias. Así, todos tienen las finanzas en orden y no tendrán problema a la hora de la aplicación del Fair Play Financiero impuesto por la UEFA, algo que otros sí sufrirán. Y el Bayern aun así pudo pagar la cláusla de recisión de Javi Martínez de 40 millones de euros sin problemas.
Y si bien no hay tantos jugadores de toque como en el Barcelona, tiene talento de sobra para plasmar una idea similar a la que planteó en el conjunto culé. Schweinsteiger, Kroos, Ribery, Robben, Müller, Lahm, Martínez, Luiz Gustavo... material tiene de sobra, sin nombrar a los jóvenes como Shaqiri y otros que se encuentran en las inferiores y que, teniendo en cuenta el trabajo fabuloso que se está haciendo en toda Alemania en el tema de juveniles, seguro encontrarán en Guardiola una motivación extra para colarse en el primer equipo. Quién sabe si no veremos al Pedrito alemán el año que viene.
Aunque muchos dirán que la liga alemana es débil y no llama tanto la atención. Quizás eso es algo bueno para Pep, ya que no va a estar tanto en el centro de la atención como estaba en Barcelona. Pero sin dudas su llegada hará mucho más popular a la competencia en todo el mundo.
Tampoco hay que olvidarse que la Bundesliga tiene estadios llenos todo el tiempo, entradas accesibles para el público y cada vez está mejor posicionada en el ranking de la UEFA, habiendo superado ya a Italia en esa lista y siempre colocando a sus equipos en instancias importantes de las competencias contientales como este año, en el que todos los alemanes pasaron la fase de grupos tanto de la Champions como de la Europa League.
Por eso, por el poder económico del país, por la solidez de sus clubes y por la organización superior, la Bundesliga está llamada a ser la "próxima Premier" y romper el trinomio de las últimas dos décadas de Italia, Inglaterra y España. La llegada de Guardiola no hará más que potenciar ese crecimiento y es, en definitiva, el golpe mediático necesario para llamar la atención del mundo y, por consiguiente, de los sponsors y el dinero necesario para que esta confirmación ocurra.
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